El Teniente Coronel Robert Risdon fue a un restaurante de comida rápida para encargar algo para cenar. Estaba ya preparado para sentarse a comer cuando aparecieron dos chicos jóvenes en el restaurante, pero no para pedir comida.
Los chicos – de 9 y 13 años – llegaron para vender unos postres caseros que habían preparado en casa para conseguir dinero para la Iglesia local. Pero el Coronel Risdon se dio cuenta de que los chicos estaban mojados y parecían exhaustos y congelados de frío. Les preguntó si habían cenado, a lo que respondieron que no.
Lo que ocurrió después fue grabado con una cámara de otro cliente del local, Jason, que estaba tan impresionado que publicó el vídeo en Facebook y pidió a sus amigos que lo compartieran.
Desde ese momento, la historia de este soldado se ha vuelto completamente viral. Y no es de extrañar:
Este es el Teniente Coronel Robert Risdon. Es el padre de dos niñas y vive en Fort Benning, Georgia.
Robert fue a un local de una famosa cadena de comida rápida, Taco Bell. Cuando fue a comer, dos chicos – de 9 y 13 años – entraron en el restaurante para vender postres caseros. Estaban intentando conseguir dinero para su Iglesia local.
Mientras estaba comiéndose su comida, Robert se fijó en que los niños estaban empapados de agua y parecían exhaustos y tener bastante frío. Pese a sus intentos de vender algún postre a los clientes del local, la mayoría de personas parecían ignorar a los pequeños.
El Coronel no pudo quedarse quieto y se acercó a ellos para preguntarles si ya habían cenando, y dijeron que no.
Lo que sucedió después se ha vuelto viral, y por suerte fue grabado por otro cliente llamado Jason.
Estos chicos llevaban toda la tarde tratando de conseguir reunir algo de dinero para poder donarlo a su Iglesia local que estaba pasando por unos momentos difíciles, ya que necesitaban fondos para poder repararla porque se encontraba en muy mal estado, y los niños estaban dedicando todas sus energías para tratar de ayudarla.
Cuando Jason publicó en Facebook el vídeo, escribió:
“Estaba en taco bell anoche cuando dos chicos aparecieron para intentar vender postres hechos en casa para reunir algo de dinero. Escuché a un soldado preguntarle a los chicos si tenían hambre y les dijo que les siguiera, que les iba a comprar algo para cenar. Realmente se lo merecían, parecían muy cansados pero no se habían detenido en su cometido. Tuve que grabar el vídeo y compartirlo. Nuestros soldados siempre están intentando cuidar de nosotros. Gracias Teniente Coronel Robert Risdon y a estos chicos por mostrarnos la importancia de luchar por lo que queremos, por favor comparte esto… Escuché cómo el pequeño dijo que quería ser como él cuando creciese.”
“Estoy un poco avergonzado por los elogios que he recibido y realmente no son necesarios” decía el Coronel Risdon. “Creo que vivimos en el mejor lugar del mundo con personas y actos de amabilidad que ocurren cada día”.
Son personas como esta la que hacen que tengamos esperanza en nuestro mundo.
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Fuente: Littlethings