Estamos encantados con esta historia porque demuestra que la sensualidad no tiene edad y que una mujer es preciosa siempre.
Christie Brinkley creía que sus épocas de modelo de trajes de baño habían acabo cuando cumplió 30 años. Por eso cuando Sports Illustrated la contactó para volver a modelar para ellos, su emoción fue indescriptible. Y qué mejor manera de celebrarlo que modelando junto a sus dos hijas de 30 y 18 años.
Christie publicó algunas fotos a modo de abreboca de la nueva edición de la revista y aprovechó para agradecer a Sports Illustrated "por enviar el poderoso mensaje de que las cosas buenas vienen en empaques de todos los tamaños y que no tenemos una fecha de expiración".
De hecho hace tres décadas que posó por primera vez para la lente de la revista y ahora lo hace siendo ejemplo para sus hijas de que los sueños se pueden alcanzar a cualquier edad.
Así se veía Christie en 1975 cuando debutó en la revista