10 Principios básicos para los padres

10 Principios básicos para los padres

Janusz Korczak fue un gran hombre que se negó a dejar a sus hijos adoptivos en el umbral de la cámara de gas. No los abandonó y murió en un campo de concentración alemán en Treblinka, junto a sus alumnos, aquellos pequeños de la Casa de los Huérfanos de Varsovia, a pesar de que él sí se podría haber salvado por haber sido liberado por uno de los guardias al reconocerlo como su escritor favorito. Eso es amor de padre.
Sonrie Para Vivir Mejor publica los 10 principios básicos que este destacado educador, escritor, médico y activista social aplicaba para educar a sus pequeños.

  1. Es equivocado pretender que tu hijo sea como tú o haga lo que quieres. Mejor ayúdale para que sea él mismo.

  2. No le exijas a tu hijo que te devuelva todo aquello que le has dado. Le diste la vida ¿Cómo puede agradecertela? Le dará la vida a otro, el otro a un tercero, se trata de una ley irreversible de agradecimiento.

  3. No descargues tus problemas sobre tu hijo para no comer el pan amargo cuando alcances la vejez. Aquello que siembras, recogerás.

  4. No trates sus problemas como si fueran cosas banales o pequeñas. La vida se da a cada uno según sus fuerzas y, créelo, para él la vida no es menos difícil que para ti y, a lo mejor, hasta más, porque carece de experiencia.

  5. No humilles a tu hijo.

  6. No olvides que los encuentros más importantes para una persona son los encuentros con sus hijos. Presta más atención a ellos, nunca podremos saber a quién encontraremos en un niño.

  7. No te tortures si no puedes hacer algo para tu hijo. Simplemente recuerda: Para el niño no está hecho lo suficiente sino todo lo posible.

  8. El niño no es un tirano que se apodera de toda nuestra vida, no sólo es fruto de la carne y la sangre. Es una taza preciosa que la vida te da para desarrollar en él el fuego creativo. Es el amor de sus padres, que no van a criar «su» niño y ya está, sino un alma concedida para protegerla.

  9. Sé capaz de amar a un niño ajeno, traído al mundo por otra persona. Nunca le hagas a este niño nada que no te gustaría que le hicieran al tuyo.

  10. Ama a tu hijo tal y como es, sin talento, sin suerte ni éxito, adulto, como sea. Comunícate con él, alégrate, porque un niño es esa alegría que todavía está contigo.


Janusz Korczak


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