La gente dice que perder peso es sencillo, de hecho, parece existir una ecuación universal para conseguir resultados inmediatos: come menos, muévete más. Pero si es tan fácil, ¿qué pasa que no todos somos delgados? Sigues todas las reglas, bebes mucha agua, vas al gimnasio y comes mucha ensalada… y sin embargo, tu peso se mantiene igual durante meses y parece que tus esfuerzos no sirven de nada.
Para la especialista en desórdenes hormonales Sara Gottfried gran parte del problema se encuentra en la forma en la que ciertas hormonas y sustancias interactúan dentro de nuestro cuerpo. Gottfried, quien obtuvo su título en Harvard, también es ginecóloga y entiende a la perfección la forma y las razones por las que nuestro cuerpo pierde o gana peso cuando el equilibrio de nuestras hormonas se ve afectado.
Gottfried afirma que aprender sobre las hormonas puede ser complejo, pero vale la pena. Sigue leyendo y descubrirás qué hormonas son y cómo volver a equilibrarlas.
1. Cortisol: la hormona del estrés (en exceso)
“Cuando tienes un nivel alto de cortisol en la sangre usualmente sientes deseos de comer azúcar o tienes adicción a ciertos alimentos. Esto te hace engordar”.
Gottfried recomienda no consumir mucha cafeína para que el cuerpo pueda reconocer, de forma natural, los momentos en los que debe dormir y estar despierto.Si esto te parece muy difícil, siempre puedes empezar tomando café descafeinado para no romper el hábito de forma tan brusca. Sigue con el té e idealmente termina bebiendo sólo té verde. El café es una de las principales sustancias que alteran el cortisol en nuestra sangre.
2. Estrógeno
Según Gottfried, el estrógeno es clave a la hora de consumir alimentos:
“El estrógeno, junto a otras hormonas, es responsable de la forma en la que tu cuerpo responde a lo que comes, bebes y a los suplementos que tomas. En palabras simples, tener un exceso de estrógeno es la causa principal por la que mujeres de todas las edades sufren más a la hora de perder peso”.
La doctora recomienda comer al menos 500 gramos de vegetales cada día, ya que la fibra que podemos encontrar en estos alimentos ayuda a excretar los altos niveles de estrógeno que podemos tener en nuestro cuerpo.
3. Insulina (en exceso)
Este es un gran problema no sólo para quienes tienen sobrepeso, sino que también para quienes tienen un porcentaje de grasa elevado a pesar de tener un peso adecuado.
“Cuando tienes sobrepeso o un peso normal pero un exceso de masa grasa, los niveles de insulina se desequilibran y tus células se vuelven inmunes a la hormona. Como resultado, los niveles de azúcar en tu sangre suben y bajan, haciendo que acumules incluso más grasa corporal”.
Gottfried recomienda alejarse de los endulzaste naturales y también beber una mezcla de un vaso de agua filtrada con dos cucharadas de vinagre de manzana. Según un estudio, esto puede ayudar a aquellas personas que tienen resistencia a la insulina.
En mi caso, acabo de darme cuenta de que tengo demasiado cortisol y de que las grandes cantidades de ejercicio que realizo sólo han contribuido a estrenar aún más mi cuerpo. ¿Será que a ti te pasa algo similar? Si descubres algo de este estilo, no estaría de más consultar con tu doctor… puede que hayas encontrado la razón por la que no consigues perder peso.