Con decisión y confianza, Sal Valentinetti subió al escenario de American’s Got Talent y cantó una increíble versión de “My Way”, de Frank Sinatra. Él interpreta la canción de tal manera que el propio Sinatra habría estado realmente orgulloso. No hubo silbidos ni campanas, tampoco había efectos especiales o bailes, sólo un hombre en el escenario con su increíble voz.
Todos y cada uno de los jueces quedaron impresionados con el final de la actuación, y Simon llegó a decir que la canción le llegó al alma. El resto de los jueces estaban de acuerdo y Heidi dio la mayor sorpresa de todas: ¡pulsó el botón de oro! “Éste es el primer día del resto de mi vida”, exclamó Sal durante la lluvia de confeti. Nos encanta su voz y ¡no podemos esperar a ver lo que pasa a lo largo de la temporada!