Esta es una preciosa historia, lo mires desde cualquier punto de vista que quieras.
Charlotte Figi tuvo su primera convulsión a los 3 meses de edad. Después de unos pocos meses continuó presentando ataques epilépticos que duraban entre 2 y 4 horas, por lo que tenía que se hospitalizada repetidamente.
Cuando cumplió 3 años, Charlie ( como la llaman sus padres), estaba teniendo 300 convulsiones semanales en promedio cada semana. Eventualmente dejó de hablar, caminar y comer.
Las convulsiones eran tan severas que su corazón dejó de latir muchas veces. Los doctores sugirieron poner a la niña en un coma inducido para dejar descansar a su pequeño cuerpecito.
Matt, su padre, encontró otro caso similar en línea en el cual la marihuana médica había ayudado a un pequeño niño con sus convulsiones. La familia decidió hacer la prueba.
La familia Figi escuchó sobre los hermanos Stanley, uno de los productores más grandes de marihuana de Colorado, EEUU. Estos 6 hermanos estaban entrecruzando una variedad de marihuana baja en THC, que es el compuesto psicoactivo de la planta, y alto en CBD, un compuesto medicinal pero no psicoactivo.
Los hermanos Stanley empezaron la fundación “Realm of Caring” (algo así como el Reino de los Cuidados), una organización sin fines de lucro que provee cannabis a adultos y niños que sufren variadas enfermedades.
La primera vez que le Paige Figi le dio a su hija Charlotte aceite de cannabis, los ataques pararon por 7 días.
La variedad que Charlie utilizó y que ayudó a otras 41 personas fue llamada en honor a ella, como Charlotte’s Web (como el libro popular “La Telaraña de Charlotte”).
Hoy, Charlotte esta espléndida. Sus ataques bajaron a 2 a 3 al mes, casi solamente cuando duerme. Camina, se alimenta ella misma y habla más y más cada día.
Si te gustó esta historia y crees que debería ser vista por todo el mundo, compártela con tus amigos!
Para los que leen Inglés, CNN hizo un reportaje de la historia muy completo. En la que se entrevista a los padres y se dan más detalles. Ver Articulo