En el recuento de los regalos de navidad más inútiles del año este, sin duda, lleva la batuta. Olvida los suéteres y calcetines, la pulsera antitiburones es uno de los peores regalos que alguien puede recibir, si no me creen, pregúntenle a este chico.
Ser atacado por un tiburón mientras nadas o surfeas, no es tan probable como podrías imaginar.
Sin embargo, una ayuda para evitar estos ataques, como portar un brazalete que repele a estos animales, te deja realizar tus actividades con algo de tranquilidad… si es que estas pulseras funcionan.
Zack Davis, un habilidoso y entusiasta surfista, recibió el Sharkbanz para navidad. Este brazalete afirma enviar una señal magnética que interrumpe los electro receptores en el hocico de un tiburón, que utilizan para navegar. Y se supone que no les causa daño alguno los animales.
Sin embargo, la primera vez que Zack salió a surfear, en Avalon Beach, State Park, en North Hutchinson Island, terminó siendo mordido por un tiburón.
“Es impactante. No fue realmente doloroso. Honestamente yo no sentía dolor, yo decía ‘Dios mío, tengo que hacer algo rápido’, así que sólo tomé la correa de mi tabla y la envolví alrededor de mi brazo, porque no quería perder sangre.”
Zack salió rápidamente del agua, pues no quería ser atacado de nuevo.
El brazalete fue un regalo de Navidad que, se suponía, mantendría a los tiburones alejados de él. Esta fue la primera vez que lo portó, y también fue la primera vez que lo mordió un tiburón.
“En todos mis años surfeando nunca me había pasado nada así. Es la primera vez que me muerde un tiburón y lo irónico es que estaba usando una pulsera que los repele”.
Ahora, su mamá quiere un reembolso, después de que ella le pidió que llevara la banda verde para sentirse un poco más tranquila. Pero más que un reembolso, probablemente la señora deba demandar a una empresa que va por la vida vendiendo tecnología inútil.
Zack ahora tiene un brazo con 44 puntos de sutura y una inusual historia.